Leer a Hannah Arendt siempre enriquece nuestro espíritu. En este pequeño ensayo nos muestra de forma lúcida cómo con Karl Marx se cierra una tradición del pensamiento filosófico en Occidente centrada en la separación entre los intelectuales y los trabajadores. Una reflexión imprescindible. La segunda parte es una evocación de la revolución húngara de 1956 y la importancia de los consejos para llegar a una democracia radical.